domingo, 3 de junio de 2007

Una historia de una vida I - El comienzo

1 de noviembre de 1934.

¡¡Hoy es un día de muchas celebraciones!! Es mi cumpleaños ¡y ya son 19! Además, la semana que viene empezamos todos los quintos a hacer la mili. ¡Qué emocionante! ¡La primera vez que vamos a ir a Salamanca! Este año somos: Benito el del Boticario, Miguel el Músico, Braulio del Barrio Arriba, Fermín de la Iglesia, Roberto el Bragas, Agustín el Loco y yo, que me dicen el Borracho Porfión, jeje, ¡serán cabrones!

Durante toda esta semana vamos a estar celebrándolo. Mi tío nos ha dejado una casa vieja que no utiliza y la hemos arreglado para la juerga. Tenemos cerveza y vino para hartarnos, y entre todo el pueblo nos han dado chorizos, salchichones, huevos rellenos, sacatrapos, perrunillas, panes, e incluso nos han regalado tres cochinos para que juguemos con ellos y finalmente los cocinemos.
Fiesta de los quintos del 34
Esta noche habrá baile en la plaza. Espero que vengan María Luisa, Julia y Catalina y sus hermanas Rosa y Adela. Rosa no se despega de sus hermanas... joder... es muy pequeña, apenas 12 años. Sin embargo, ha venido su hermana Adela... ¡Joder cómo me gusta esta chica! Tengo muchas ganas de bailar con ella. Aunque ya sabe lo que siento por ella.... ¡se me está resistiendo!
Fiesta de los quintos del 34
Hoy mi padre, Manuel el Chico, no me ha hecho ir a trabajar al campo porque me tienen que medir. Vamos a aprovechar esta semana que estamos en medio de la temporada de fin de la vendimia y comienzo de las aceitunas... por un lado yo puedo estar despidiéndome de mis amigos y por otro él puede atender la visita de un amigo suyo que es muy importante en la política española del momento, el señor Francisco Largo Caballero.

En unos instantes vendrá el médico a medirnos y aunque son sólo las 10 de la mañana todos vamos ya bastante contentos.



Mucho ha cambiado la vida hoy día eliminando antiguas costumbres que se arrastraban hasta no hace mucho desde la Edad Media. Ya no existe la mili, y tenemos un ejército profesional, cosa de la que nos podemos alegrar, ya que podemos elegir si queremos hombres y mujeres hacer carrera en el ejército.

Sin embargo, la celebración tan típica de pueblo de los quintos se sigue conservando en muchísimos lugares, donde los chavales que cumplen la mayoría de edad están una semana de fiesta a costa del dinero pedido al resto de vecinos además de otras diferentes tradiciones. Esta tradición es un síntoma que hace diferenciar entre los pueblos de tradición, solera y orgullo, y los pueblos que han sido construidos hoy día como dormitorios de ciudades mayores o víctimas de los pelotazos inmobiliarios, donde los vecinos se miran los unos a los otros como lo que son: totales desconocidos.

Referencia de las imágenes.
La primera imagen está tomada del Ayuntamiento de Lardero y la segunda de Piornal.net.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo esencial creo que no cambia mucho, seguimos deseando que esa chica o ese chico aparezcan. Y la emoción de un viaje, que hoy sería el de fin de carrera con los amigos, sigue siendo la misma.
Me ha encantado, me encanta zambullirme en cartas o revistas o lo que sea, una vez que ha pasado el tiempo.

Lucía dijo...

Yo he conocido esta tradición por mi padre, que aún habla de sus quintos ...

Es verdad que ahora en general no conoces a tus vecinos. Se ha perdido proximidad.

Desesperada dijo...

yo desconocía esa tradición, aunque si lo llego a saber hago la mili!!!!!!!!!!!

juan rafael dijo...

Ya, si cuando se trata de salir de fiesta...

Anónimo dijo...

Yo fui la segunda hornada que evitó hacer la mili, y la última en mi pueblo en celebrar los quintos.

La verdad es que nos las tuvimos que ingeniar para conseguir pasta, inventándonos historias porque la gente claro decía: "si vosotros no hacéis la mili".

Mucha fiesta, mucho cachondeo, animales en la cochera donde estuvimos.

Y sobretodo canciones de los quintos!! Acabamos el 80% de los quintos sin voz de tanto cantar.

La verdad es que es una tradición que es una lástima que se haya perdido, porque se pasaba en grande.

Qué recuerdos!

clipper dijo...

pues no sabia nada yo jaja
cuando sea mayor de edad...qye ya queda poquito..hare una fiesta como esas jejejeje

Anónimo dijo...

De Efraim Medina, el autor de Erase una vez el amor pero tuve que matarlo hay los siguientes sitios en la red?

www.pistolerosputasydementes,blogspot.com y www.myspace.com/efraimmedinareyes y este otro que es de su banda musical www.myspace.com/sietetorpesband

me parecieron muy divertidos e interesantes. Hace tiempo leí algo tuyo comentando ese libro que también compré, leí y se convirtió en mis favoritos junto a otros de Medina como Técnicas de masturbación entre Batman y Robin y Sexualidad de la Pantera Rosa. ¿Quién soy? Sólo un lector asiduo de tu blog,

Camilo T.

Anónimo dijo...

Un pregunta, lo de la fecha de cumpleaños es casual????

Tamaruca dijo...

Yo tampoco estoy segura de que cambiemos tanto. Por muy profesioanl que sea un ejército, nunca dejará de ser un ejército. Un buen cambio sería que no existiese porque no lo necesitamos. Utopía.

Mmuaa..

Jano dijo...

dude. La fecha del cumpleaños no es casual... pero seguramente no tenga nada que ver con lo que estés pensando... que de hecho no sé qué es.

Hidalgo. Jajajaja, sabía yo que no había fiesta que no hayas celebrado!!