Estos dos últimos días han sido de los más intensos que he vivido. Aunque sólo hayan sido eso, dos días, me parece una semana.
El pasado sábado día 28 de abril tenía el primer examen para la primera prueba para poder coger ese segundo barco del que os he hablado, por lo que el viernes comencé mi viaje para ir al lugar de la realización de tal prueba: Madrid.
Madrid es una ciudad increíble, y aunque tenía el recuerdo de mi huésped de haber estado alguna vez, yo no lo había hecho nunca. Esta ciudad para los habitantes de las provincias españolas es muy curiosa porque puedes ver aquellas cosas de las que hablan algunas veces en la tele: el pirulí, la plaza de toros de Las Ventas, carretera de 4 carriles en el mismo sentido, atascos, obras,... y lo que más me gusta: ¡¡las calles que aparecen en el Monopoly!! ¡¡Están todas!! Fuencarral, La Castellana, Lavapiés, Serrano,...
Pero por otro lado, Madrid tiene una vida subterránea increíble. En cuanto bajas del autobús, coges el metro.... y sin haber visto nada de Madrid, apareces en un barro residencial. Tranquilos, que no me perdí, iba al piso de unos amigos para quedarme a dormir. Justo al llegar, me ofrecieron salir al centro a tomar unas cervecillas, y claro, no pude rechazarlo. Como ya dije en otro post, tenía pensado coger el metro... ¡y vaya si lo he cogido! El metro en Madrid es el pan nuestro de cada día, y coger tres líneas para ir a tu destino no creo que sea algo raro para la gente que está allí.
Estuve tomando unas cervecillas con amigos que hacía mucho tiempo que no veía por la zona de Sol en una zona que es supuestamente de tapas. Pero lo mismo que los madrileños llaman doble a un tubo, confunden la palabra tapa con la de manises. Pero es que los madrileños son muy listos, ya que cuando un vaso de cubata lo llenas de cerveza (definición de tubo), los madrileños lo llaman doble porque te echan un poco más de cerveza que una caña y te lo cobran al doble. Y las tapas que ponen no son más que unos cacahuetes que no le quitan el hambre ni a Pulgarcito.
Tras estar un ratito muy muy muy agusto, estar rodeado de buenos amigos, me pregunté que por qué no estaba yo también en Madrid trabajando en lugar de estar jugando a los barquitos... podría estar con esa gente tan simpática, tener un sueldo a final de mes e incluso podría conocer a gente tan interesante como Marta de Esparta y mucho mejor ahora que está soltera, o al autor de 2000 intenciones que seguro que no le importa prestarme una, o a La Interrogación para plantearle más preguntas y muchos etcéteras... pero me imagino que sería el efecto del alcohol.
El pasado sábado día 28 de abril tenía el primer examen para la primera prueba para poder coger ese segundo barco del que os he hablado, por lo que el viernes comencé mi viaje para ir al lugar de la realización de tal prueba: Madrid.
Madrid es una ciudad increíble, y aunque tenía el recuerdo de mi huésped de haber estado alguna vez, yo no lo había hecho nunca. Esta ciudad para los habitantes de las provincias españolas es muy curiosa porque puedes ver aquellas cosas de las que hablan algunas veces en la tele: el pirulí, la plaza de toros de Las Ventas, carretera de 4 carriles en el mismo sentido, atascos, obras,... y lo que más me gusta: ¡¡las calles que aparecen en el Monopoly!! ¡¡Están todas!! Fuencarral, La Castellana, Lavapiés, Serrano,...
Puerta de Alcalá |
Cibeles |
Tras estar un ratito muy muy muy agusto, estar rodeado de buenos amigos, me pregunté que por qué no estaba yo también en Madrid trabajando en lugar de estar jugando a los barquitos... podría estar con esa gente tan simpática, tener un sueldo a final de mes e incluso podría conocer a gente tan interesante como Marta de Esparta y mucho mejor ahora que está soltera, o al autor de 2000 intenciones que seguro que no le importa prestarme una, o a La Interrogación para plantearle más preguntas y muchos etcéteras... pero me imagino que sería el efecto del alcohol.
8 comentarios:
A mi también me fascina -y a la vez me agobia- la vida subterránea de las grandes ciudades. No puedo evitar sentirme como una tortuga ninja, me da claustrofobia :$
Mmuackss!!
ja ja ja qué recuerdos los dobles, las inexistentes tapas... ¡y los minis! menudos pedos! ja ja ja a pesar de todo Madrid es acojonante, la adoro!
Parece que te lo pasaste muy bien en nuestra capi. Tiene sus pros y sus contras pero sabe alegrar el corazón de sus visitantes.
Madrid es una ciudad tremenda. Para los que vivimos en una ciudad pequeña y accesible como es Albacete, ir a esta ciudad es quedarse boquiabierto con todo lo que hay allí.
Lo complicado que parece todo para los que no están acostumbrados y lo fácil que lo hacen los que están acostumbrados a todo lo que es metro, autobús y maneras de moverse por la inmensa ciudad que es Madrid.
En fin, yo cada vez que voy quedo maravillado y a la vez mosqueado por los atascos (que eso me jode bastante, jeje).
Un saludo.
buenos dias que tal? parece que te lo pasastes mu bien, no?, ainssssss por aqui por canarias hay un remanso de paz que no sabes tu bien, ajajajajajaj pero bueno de ves en cuando no esta mal un poco de locura, por cierto yo no se si es que soy yo que estoy cegata perdia, ajajajajajaj, pero mira que me a costado leerte eh, jajajajajajaj
besitos y que pases un buen dia
No sabía Interrogación que eras madrileña. Actualizaré el post para incluirte en las personas a conocer de Madrid.
Besos y abrazos para todos y todas!!
bueno... aunque esté soltera has ido a venir a madrid justo cuando yo me iba a castellón :P
la próxima vez será ;)
¡Vaya Marta! ¡Qué mala suerte!
Bueno, eso mismo, la próxima vez ;)
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