lunes, 16 de abril de 2007

El metro

Ya estoy preparándome para mi próximo viaje. Concretamente para coger el metro. Recuerdo la primera vez que me monté... me resultó increíble cómo bajo el subsuelo de la ciudad existe ese submundo compuesto de trenes que a diferentes alturas bajo suelo transportan a miles de personas cada día. Rara es la persona que no necesita utiliizarlo en su día a día en ciudades como por ejemplo Madrid.

Ahora quiero comprobar qué se se siente.

Concretamente en Madrid nos han cambiado la forma del plano, que ahora es más cuadriculada, y la gente se queja porque dicen que no representa la geometría de la ciudad.

Sin embargo, estoy observando los planos de metro de otras ciudades del mundo, para irme haciendo el cuerpo para futuros viajes.

El plano del metro de Nueva York es tan excelente como lioso, pero le coges pronto el truco. Ya estoy viendo cómo ir desde el barrio de Queens hasta Central Park. Una pequeña gran visita e ir al World Trade Center. Coger otro metro y visitar Broadway. Otra línea distinta y estar en Brooklyn. Sólo el metro puede transportarte a distancias tan lejanas en el mismo día y dentro de la misma ciudad.
El metro de NY. Uno de los más famosos del mundo.
Quiero tener ese recuerdo en mi mente.
Todavía me quedan muchos medios de transporte que probar. Dentro de poco, habrá uno menos.

4 comentarios:

Isabel Burriel dijo...

Pues ya nos contarás. Tiene sus pros y sus contras pero te lleva a todos sitios practicamente.

Anónimo dijo...

Oye pues otra cosa no, pero el metro de NY da la sensación de viejo, no? En comparación con los que pululan por España, da la sensación de viejuno.

Suerte en ese viaje en metro. Yo lo he cogido pocas veces, en mi ciudad no hay metro, y de las veces que lo he cogido, no se por qué casi siempre ha sido en hora punta...

Que si en Madrid a las 8 de la mañana, que si en Valencia en plenas fallas... no se lo que es disfrutar de un viaje tranquilo en metro, jeje.

Un saludo crack.

Tamaruca dijo...

Lo del metro es muy sencillito, sólo hay que perderse una vez para espabilar y cogerle el truco ;D

En ciudades como Londres donde la amabilidad brilla por su ausencia, es mejor leer tranquilamente las indicaciones que está muy bien explicado todo en los carteles.

Y a mi que no me gusta el metro... Me siento como una tortuga ninja. Donde esté mi mountain-bike...

Un besico!

Jano dijo...

Hidalgo Informático... donde tú ves un metro viejo, yo veo el metro más interesante que conocer.

Sin embargo, en mi día a día, tampoco necesito el metro.